La Ventana de Trutruka

miércoles, mayo 10, 2006

Un emperador sin imperio


Revuelo está causando en Costa Rica la pretensión del recién asumido presidente, don Oscar Arias Sánchez, de convertir el Centro Nacional de Cultura (CENAC) en su nueva Casa Presidencial.
La noticia cayó como balde de agua fría para muchos y muchas y puso a nadar en las aguas de internet y la prensa escrita nacional cantidad de palabras. Así lo consigna Julia Ardón en su blog http://porlaboca.blogspot.com/
Visítelo, allí encontrará opiniones de gente ligada a la cultura como Alfonso Chase , escritor y Premio Magón de Cultura; Alvaro Mata, de Baco Danza-Teatro; Carlos Cortés, escritor; Ernesto Calvo, director del Museo de Arte y Diseño Contemporáneo, cuya sede está en el CENAC; Flora Fernández, comerciante y activista josefina ; Eduardo Chang, artista plástico salvadoreño, Rubén Pagura, artista y activista, Jorge Albán, artista, María Elena Carballo, nueva Ministra de Cultura; Gustavo Adolfo Coto Calvo, abogado, Claudia Barrionuevo, dramaturga, Adriano Corrales, escritor, Aurelia Dobles, periodista, Cristian Cambronero, periodista, Eugenio García Chinchilla, productor audiovisual y abogado....

Y el pueblo de San José no se ha quedado de brazos cruzados y ha salido a las calles bajo las consignas de "El arte y la cultura son patrimonio y derecho de la humanidad".; "Cualquier atentado contra el arte y la cultura es un atentado contra la humanidad"; "Violentar los derechos al arte y a la cultura es violentar la identidad nacional y la paz"; "El CENAC es de todos, no de uno"; "El CENAC es para la cultura"…
Para conocer más del problema, transcribo un artículo del escritor Adriano Corrales Arias, publicado en www.pieldeleopardo.com


UN EMPERADOR SIN IMPERIO

Con el anuncio por parte del presidente ¿electo? y flamante "Premio Nobel de la Paz", Oscar Arias, de trasladar la Casa Presidencial de Zapote al Centro Nacional de la Cultura (CENAC), no sólo nos enfrentamos a un disparate administrativo que evidencia los cortes de políticas y proyectos entre diversos gobiernos, sino que podemos vislumbrar el carácter autoritario y caprichoso del nuevo inquilino de la mencionada casa.

Recordemos que el CENAC no solamente alberga las oficinas del Ministerio de Cultura, sino también al Museo de Arte y Diseño Contemporáneo (MADC), la Compañía Nacional de Danza, el Teatro de la Danza, el Teatro 1897, el Colegio de Costa Rica y el Centro de Documentación de Patrimonio Histórico Luis Ferrero. Así que, de trasladarse la Casa Presidencial, dichas instituciones no tendrán sitio de albergue, al menos momentáneamente.

Por otra parte es claro que el CENAC fue concebido por sus diseñadores, con base en las antiguas instalaciones de la Fábrica Nacional de Licores (FANAL), como un espacio cultural que debía albergar las instituciones mencionadas.
(¿Coincidencia? Don Oscar es un gran productor de alcohol).

Dicho proyecto arquitectónico, tan necesario como excelente, dotó a la capital de un complejo artístico-cultural que tanto precisaban la ciudad como el sector cultura. Igual recordemos que las actuales instalaciones del Tribunal Supremo de Elecciones –cuestionado por su gestión en la pasada justa electoral– fueron erigidas en un edificio abandonado y a medio palo que alguna vez fuera proyectado como la nueva Casa Presidencial, la cual, obviamente, nunca se construyó, prefiriéndose el traslado de la Casa Amarilla a Zapote.

De tal manera que la actitud de don Oscar –con la venia del ministro del ramo saliente, señor Guido Sáenz, quien en sus memorias subraya que son muy amigos y relata la forma en que aquél negociara la integración de la Sala Cuarta para su reelección– no sólo denota desconocimiento histórico y urbanístico, sino que perpetúa una práctica gubernamental de desechar lo avanzado en otras administraciones para aprovecharse de sus pírricos logros, pero empeorando el problema. Porque, ¿hacia adónde se trasladarían las instituciones culturales que hoy ocupan el CENAC? ¿Hacia el hoyo que ha intentado cavar don Guido Sáenz en la antigua Aduana?

Cuando se toma una decisión, como la reseñada, sin consultar a los posibles afectados, mucho menos a especialistas y funcionarios del ministerio de Cultura, o a los artistas y miembros del sector, se está frente a un gobernante con ínfulas de emperador que nos previene acerca de su posible carácter déspota.

Se olvida don Oscar que apenas fue electo por un 25% del electorado nacional y que, en todo caso, su elección ha sido muy cuestionada. Por lo demás, es conocido el "bazoocazo constitucional" –tal y como denominó el expresidente don Luis Alberto Monge el golpe de Estado a la tica– que permitiera la reelección del señor Arias de manera absolutamente inconstitucional.

Esas ínfulas imperiales no cuadran a un país de gran tradición democrática como el nuestro. Aquí no podrá haber emperador porque sencillamente no hay imperio. Y de persistir el nuevo presidente en esas prácticas inconsultas y altaneras, habrá que salirle al paso ya no solamente con lecciones de historia y urbanística, sino con las grandes mayorías que no votaron por él desplegadas por calles, potreros, plazas, parques y avenidas de la patria, exigiéndole mesura, justicia y ecuanimidad. Porque recordemos que el centro del imperio queda más al norte y don Oscar, a lo que más podría aspirar es a cónsul, o procónsul.

Aún así, sepámoslo bien –y ojalá que no lo soslayen don Óscar ni los diputados y ministros de su gobierno–- las banderas antifilibusteras de 1856 aún no han sido arreadas.

Y eso…

5 Comments:

At 11:18 p. m., Anonymous Anónimo said...

Yo pensaba que la patudez y el descaro, era más reinante por estos lares y que la gente del caribe era mas light que nosotros, pero este presidente se las mandó en lo care raja y nos dejó enanos...

Menos mal que las personas sí atinaron a defender lo que es del pueblo y bueno habrá que esperar que ese sueño de viir y dormir entre tanta historia cultural no se haga realidad.

Nos vemos, nos seguiremos viendo

 
At 10:15 a. m., Anonymous Anónimo said...

"carácter autoritario y caprichoso del nuevo inquilino de la mencionada casa"
¿por qué, es observable esta característica en las personas que debieran estar al servicio de otros? No me resigno, no lo acepto, a lo mejor porque me falta lo mismo que a ell@s: humildad.

 
At 2:21 p. m., Anonymous Anónimo said...

Sobre Costa Rica...no hay caso.... es sencillamente insoportable todo lo que sucede en ese pais.

 
At 5:28 p. m., Anonymous Anónimo said...

digno de un pais bananero!!!!!

 
At 1:07 a. m., Blogger Julia Ardón said...

Qué agradable sorpresa ver esto publicado aquí.
Mil gracias.

 

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